La activación de la respuesta de emergencia, tras los sismos que el pasado 25 de julio tuvieron lugar en la zona debido a la actividad sísmica provocada por el complejo volcánico Chiles-Cerro Negro, se realizó en coordinación con el Distrito de Salud de Espejo-Mira, según afirmó Stalin Onofre, coordinador de Ayuda en Acción en Chota-Mira:
“Hemos armado 140 kits de alimentos y de aseo personal, que es lo que hemos visto como una atención inmediata. Una segunda etapa de respuesta va a ser el apoyo para la reconstrucción de infraestructura educativa en la comunidad de Piquiucho. En esta zona nos han reportado que hay varios daños en la infraestructura, y que queremos recuperar antes del inicio a clases”.
Llegamos hasta las zonas rurales más remotas
Durante esta primera fase de respuesta, Ayuda en Acción constató también varios problemas en las comunidades como la falta de acceso a agua potable, la posibilidad de incremento de casos de COVID-19 debido a las condiciones de hacinamiento de la población afectada, así como el aumento de enfermedades respiratorias, especialmente en niñas y niños por el clima.
Además, se priorizó la ayuda en zonas rurales y de difícil acceso. Para Blanca el sismo se sintió fuertemente y afirmó que el siguiente paso es salir adelante: “El sismo nos afectó mucho, porque se derrumbaron las casas, y estamos sin nada, ahora en las carpas viviendo. Ayuda en Acción nos entregó un kit con comida y agua, e insumos de higiene como cepillos, jabones, papel. No nos queda más que seguir adelante y tomar fuerzas”.
Hasta el momento, el Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias ha reportado que al menos 577 familias han sido afectadas, y más de 500 viviendas e inmuebles se encuentran dañadas y no son habitables.